El que no quisieron que se viera
Los álgidos tiempos políticos demandan que la mayoría de las entradas del blog estén relacionadas con temas como éste.
Nauseas es lo que provoca la pseudo- cobertura mediática realizada anoche 15 de septiembre en las diferentes plazas de México y hasta en algunos lugares del mundo, pero el zócalo capitalino, pues, ni mencionado. Se demostró la unidad del “país” (entiéndase por país la República de Televisa), unidad contra quienes piensan distinto a como la caja idiota dicta; los merolicos, bufones, mascotas, etc. de las televisoras se encargaron de hacer una cobertura enorme sin siquiera pasar, ni por accidente, por el zócalo donde Alejandro Encinas dio en grito.
Miremos al interdicto de los pinos decir, como ya es costumbre, estupideces; “¡Viva la democracia!, ¡Vivan las instituciones!, ¡Viva la unidad de las y los mexicanos!” Llega entonces el momento en que las nauseas provocan un vomito severo y constante, constelación de grumos acompañados por bilis. Mucha.
¿Cuál democracia?, ¿Acaso la que él se encargo de eliminar?; ¿Cuáles instituciones?, ¿Acaso las que él se esmeró como nadie en corromper?; ¿Cuál unidad?, si lo único que ha logrado es dividir al país.
Una aberración tremenda, cinismo sin precedentes; es aquel que ha hecho todo por destruir lo que vitorea el mismo que invoca y celebra esos conceptos: democracia, instituciones, unidad; todo ello destruido y pisoteado por los fascíficos pero hipócritamente tomado como bandera. Momento en el cual el vómito se intensifica.
"Y en ese instante vi al apocalipsis cara a cara. Y comprendí que el santo temor al Juicio Final radica en la intuición demoniaca: uno ya no estará para presenciarlo. Y vi en el reojo de la Bestia con siete cabezas y diez cuernos, y entre sus cuernos diez diademas, y sobre las cabezas de ella el nombre de blasfemia. Y la gente le aplaudía y le tomaba fotos y videos, y grababa sus declaraciones exclusivas, mientras, con claridad que había de tornarse bruma dolorosa, llegaba a mí el conocimiento postrero: la pesadilla más atroz es la que nos excluye definitivamente."
----------------------Carlos Monsivais
"A partir de hoy el zócalo de la ciudad de México no existe, es tan sólo un recuerdo de algún sueño de algunas personas, un mito genial". Televisa y Azteca borran del mapa al zócalo de la ciudad de México con una torpe e improvisada cobertura de plazas en todo el país, pero la más importante, la de la capital, ha dejado de existir… o quizás nunca existió. Provocación y descaro total.
Lo más lamentable, es que ante esas pruebas de entreguismo y bloqueo informativo, haya personas ciegas y manipuladas que no se dan cuenta lo que sucede; otra prueba más de la complicidad de los medios con la imposición y violencia, la violencia de la exclusión.
“El ignorante es un ser medio ciego y que tampoco oye bien, con lo que su existencia es estrecha y limitada.”
-------------------Pericles
Y claro que quienes pensamos nos enojamos.
2 Comments:
Mi buen Kronos, me temo que difiero de tu opinión... no sé si quieras llamarme optimista, pero la Convención Nacional Democrática (de la que regresé apenas hace 20 minutos) fue lo único que me dejó. Yo no opino que el Zócalo capitalino desapareció del país, más bien quiero creer que se ha vuelto una exclusiva de la Historia: el día de hoy la plancha de la constitución es el único lugar efectivo para ver o hacer historia en este país.
Si tuviera un poco más de tiempo extendería mi comentario... pero mejor se los dejo a modo de reflexión para que podamos seguir hablando sobre el tema... ya saben donde encontrarme www.imperiofalactico.blogspot.com
Saludos!! ya soy fan de tu Blog.
Con respecto al comentario en mi blog... muchas gracias y sería un honor que pusieras un link del Imperio Falactico en tu página, así como yo, desde que encontré la sombra del discruso, puse uno con esta dirección en el mio. Saludos y sigamos con este proceso de retroalimentación que es muy productivo.
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